Desde hace un par de semanas hay
un descontento generalizado entre los moradores de la ciudad de México y la
zona conurbada, ya que como anunció el Jefe de Gobierno Miguel A. Mancera, se
realizaron cambios en el programa “Hoy no circula”, las cuales entraron en
vigor el 01 de julio del 2014, lo cual, como se podía esperar, provocó que
cientos de personas inconformes se manifestaran en las principales arterias de
la ciudad y accesos carreteros hacia la misma; el motivo de dicha inconformidad
es que los autos de más de 15 años de antigüedad dejarán de circular un día a
la semana y todos los sábados del mes, esto con el objetivo de mejorar la
calidad del aire, ya que la secretaría del medio ambiente asegura que el
“descansar” a estos vehículos ayudará a alcanzar el objetivo propuesto.
Muchas opiniones se han vertido
al respecto, desde los usuarios, hasta los expertos, coincidiendo algunas en
que el programa no funciona y que las medidas implementadas son fútiles y lo
han sido desde que se implementara el mismo en 1989. Otras tantas se sitúan
bajo el esquema de la conspiración (vertiente alentada por el “peje” desde su
primera candidatura a la presidencia) de que estas modificaciones se
implementaron con el único propósito de
impulsar la industria automotriz, quien si bien no está en números rojos,
tampoco goza de una soltura bursátil, ¿por qué? Pues porque simplemente el 90 %
de las personas que tienen un auto de más de 15 años, lo tienen debido a que es
lo que se ajusta a sus posibilidades económicas, a menos que sea un auto de
colección y tengan un vínculo emotivo con su auto. Ante estas conjeturas, la
industria del sector automotriz ha negado que esta medida implementada por el
jefe de gobierno le ayude en lo más mínimo, pues reconocen que la economía
nacional está en crisis (pues siempre, ¿no?). Deteniéndome en este punto, y
concediendo el beneficio de la duda, supongamos que los representantes de las
compañías de automóviles estén diciendo la verdad y las medidas por todos
conocidas (y enunciadas al principio del texto) no les beneficien o bien, no
sean el objetivo primordial del tan odiado programa vehicular; pero siendo
realistas, de manera indirecta aumentarán las ventas, porque con tal de poder
circular los más días posibles muchos haremos el esfuerzo de cambiar nuestros
autos, tal vez no por el tan preciado Híbrido (que en la mayoría de los casos
además de feo es igual de caro que un auto de lujo), pero si por un auto con
una mayor vida “útil” y es aquí donde todos nos preguntamos; ¿realmente esto
soluciona el problema de la calidad del aire?, no.
Como hecho adicional y
alimentando la tan socorrida “teoría de la conspiración”, leí una noticia en el
periódico en donde informaban que la empresa BMW tiene un proyecto de 2 años
para edificar una armadora aquí en nuestro país, lo cual, con los hechos
acontecidos me hizo cuestionarme, si la economía de la región esta mermada
(contemplando que utilizarían a México como plataforma de exportaciones a toda
Latinoamérica), ¿por qué traer un proyecto con el cual la empresa alemana
planea vender 150 mil unidades de vehículos al año?.
Ahora bien, volviendo a la
realidad, a nuestra realidad y dejando de lado cualquier conjetura mal
fundamentada y especulación conspiratoria, ¿cuál es la opción factible en estos
momentos?; pues para todos esos cientos de ciudadanos que entre que juntan sus
ahorros, venden un riñón o ven como le hacen para cambiar su automóvil, el
único camino posible es… “la mordida”. De nueva cuenta nos topamos con ese
artilugio milagroso que evita que se sufran las penalizaciones meritorias por
una infracción, o bien, que hace que los trámites (en su mayoría los
gubernamentales) “fluyan” (más rápido o simplemente se lleven a cabo). Sin
irnos más lejos, a dos días de implementada la modificación del programa “Hoy
No Circula” hubo varios reportajes en los medios noticiosos de que en tal o
cual Verificentro (Centro de Verificación Vehicular), se aceptaban “mordidas”
para “brincarse” la prueba y obtener el holograma 1 (que permite que solo no
circules 2 sábados al mes y 1 día entre semana). Todos sabemos que esto, aunque
no hubiera sido develado por los periódicos y noticieros, es cierto y que en
todos lados se da, como dije, es algo que hace que las cosas “fluyan” o “fluyan
mejor” y lo triste del asunto es que llega a ser tan habitual que hasta se
puede decir que cae en nuestros rangos de normalidad y hasta nos es extraño
cuando intentamos sobornar a algún funcionario público y este no se “deja” o a
la inversa.
Sobre este tema departíamos (jajaja
esa palabra se la “volé” al promo de Noche de Nachos1) mi hermano
Otorongo y yo el día de ayer al “calor” de unas “Leonas”, y justo llegamos al
punto en el que haciendo una reflexión entre dos situaciones, dijimos: “siempre
hemos vivido en crisis, así como siempre hemos vivido entre la corrupción”.
Hecho que nos hace volver a la pregunta filosófica: ¿qué fue primero el que
acepta la “mordida” o el que la ofrece (seguimos hablando del soborno ¿eh?)? Y
es que, no porque sea parte del sistema tiene que ser lo “correcto” ni lo que
se tiene que hacer. Yo opino firmemente (y recordando mi clase de Análisis de
Decisiones y Costo-Efectividad) que todos tenemos un pensamiento crítico y
reconocemos que las situaciones en las que muchas veces nos vemos involucrados
no son correctas, tanto ética como operacionalmente, pero lamentablemente
sucede que aunque tenemos un pensamiento crítico, no tenemos la fuerza de ir en
contra del sistema y nos vemos encerrados en una jaula muy cómoda de la cual
nos quejamos pero la cual no hacemos nada por destruir y, en ciertas ocasiones,
hasta buscamos como hacer que se vea más “bonita”.
Yo incito a que empecemos a
cambiar nuestro pensamiento y nuestra actitud de una manera más positiva y
reactiva, realmente entendiendo que si queremos que nuestro entorno cambie de
una manera favorable, tenemos que esforzarnos y ¡hacer que suceda!
Regresando al tema inicial, con
el que abrí esta columna, desconozco la solución al problema del “Hoy no
circula”, ya que es un problema tan complejo que tiene muchas aristas, las
cuales representan diferentes puntos de vista del mismo problema; no sé si
mejorando el transporte público (en reducción de contaminantes y aumento de
unidades, aunado a la seguridad de los pasajeros), bajándonos del auto, viviendo
más cerca de nuestros trabajos y utilizando bicicletas como medios de
transporte (que siendo honestos implica como un escenario más difícil, ya que
habemos algunos que recorremos distancias de más de 30 km entre la casa y el
trabajo), utilizando energías renovables (el destete de los hidrocarburos) y
mejorando la disposición de nuestros desechos en general, sean soluciones para
lograr mejorar la calidad del medio ambiente en el que nos desenvolvemos y así
vivir en un mundo sin programas “Hoy no circula” y sin “mordidas” para obtener
los hologramas 1. Puede que la solución sea vivir en un mundo más “Hipster”
dado que es lo “Trendy” en estos días ¿no? (Continuará…)
1.
Noche de Nachos es un programa que se transmite los miércoles a las 21:00 h por
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